Una niña de siete años falleció luego de que hace cuatro días ingiriera el producto pirotécnico conocido como “rascapiés” que compró en una vivienda del pueblo joven Saúl Cantoral de Chiclayo, confirmaron fuentes locales.

La menor dejó de existir aproximadamente a las 14:30 horas en el hospital Las Mercedes.

Fuentes policiales informaron que la pequeña M.R.E. compró una bolsa de rascapiés a la señora Grimaselda Ziposo Zeta, en cuya vivienda funciona un comedor del programa del Vaso de Leche.

La pequeña comenzó a jugar con el producto tóxico e ingirió uno de ellos. Como reacción al material fosforado, la niña presentó vómitos, por lo que fue conducida por sus padres al nosocomio chiclayano.

En el hospital le diagnosticaron una hemorragia digestiva que afectó a otros órganos y finalmente le provocó daño cerebral, según explicó el médico Edwin Huancas Ojeda.

La madre de la menor, Erika Espinoza, pidió que se intervenga a las personas que comercializan productos pirotécnicos.

Fuente: Andina