Dos locales donde se preparaba y vendía turrones de Doña Pepa en condiciones inadecuadas fueron clausurados por personal de la Gerencia de Fiscalización y Control de la durante un operativo realizado en Cercado de Lima a fin de salvaguardar la salud de las personas que en el mes de octubre consumen en mayor cantidad el popular dulce.

Inspectores de Vigilancia Sanitaria de la comuna encontraron dos inmensas ollas con frutas en proceso de fermentación en el interior de una vieja pastelería ubicada en la Plaza San Martín (Av. Nicolás de Piérola, 987). La mezcla de fruta que se iba a combinada con chancaca para elaborar la miel del tradicional postre mostraba presencia de hongos y un fuerte olor.

En la zona que servía de almacén en el mismo lugar, se detectó que los panaderos dejaban sus ropas y calzado al llegar para iniciar su faena de trabajo muy cerca de los alimentos que iban a ser usados. “Además almacenan el combustible con el cual prenden los hornos y eso produce un gas inflamable cerca a fuentes calor y fuego. La práctica de almacenamiento en este lugar no es la óptima, es muy riesgosa”, comentó Martí Reyes, representante de la gerencia de Fiscalización.

Una situación muy parecida se comprobó en el interior de la cocina de una pastelería ubicada en el numeral 344 del Jr. Conde Superunda, cuyos panaderos horneaban la masa del turrón usando planchas y bandejas oxidadas, pero además, almacenaban los guindones que luego decorarían el postre en baldes sucios colocados en los suelos.

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