“El contenido de ’El Chino’, ’El Men’, ’El Tío’, ’La Chuchi’, ’El Mañanero’, ’Más’ y ’El Chato’ era un asco, pero peor era el modo como se producían, recibiendo, a cambio de dinero, la indicación de a quién demoler en la portada del día siguiente”, escribió.

En su columna en el diario ‘La República’, Álvarez Rodrich señaló que el delito por el que se acusa a Fujimori es organizar el desvío de 122 millones de soles de los fondos de las Fuerzas Armadas al SIN para comprar la línea editorial de los diarios y así difamar y destruir a los enemigos políticos del gobierno de entonces.

Insistió en que el exmandatario era el principal beneficiario político de la prensa ‘chicha’ y remarcó la existencia de testimonios concurrentes que señalan que él daba las órdenes y aprobaba los titulares que debían salir todos los días.

“Él (Alberto Fujimori) era, junto con su socio Vladimiro Montesinos, el proxeneta de estos medios y la ‘mami’ del burdel (…) La condena no solo debe ser por robarle al Estado, sino por querer prostituir al periodismo y al Perú”, enfatizó.