“Da vergüenza ajena (…) que por politiquería se remueva a la jueza que no paró ese desalojo en Cajamarca, simplemente porque no se acobardó ante un desdichado e iracundo señor que recibió a los efectivos de la Policía con bombas molotov, fierros y piedras”, escribió en su columna diaria en ‘Perú.21’.

Aldo Mariátegui remarcó que “ya se está haciendo demasiada demagogia con un lamentable incidente policial”, calificando de “alucinógenos de desmedidos” a Nelson Manrique, Rocío Silva Santisteban y al sacerdote Marco Arana.

“Está bien que este sea un ‘país cheverengue’, pero no sean tan patéticos”, remarcó. De otro lado, criticó que el fiscal de la Nación, Carlos Ramos Heredia, anuncie una tardía investigación al “aborrecido” presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Manuel Burga.

Como se recuerda, la Policía Nacional relevó de sus cargos al jefe del Frente Policial de Cajamarca y a otros diez efectivos que ocupaban cargos de jefatura en diferentes unidades por la actuación policial en el desalojo que le costó la vida a Fidel Flores, quien murió al recibir un balazo en el pecho.

Esta medida fue ordenada por la magistrada Carmen Araujo, quien fue degradada y enviada a un juzgado de paz. El agente que disparó a la víctima, Norvil Gonzales, fue dejado en libertad y afrontará el proceso con comparecencia restringida.