En el transporte público del , qué duda cabe, se puede encontrar un sinfín de situaciones que si bien son indignantes, molestas o incómodas, a lo largo del tiempo se han hecho costumbre, las vemos como parte del servicio que se presta y .

No es raro, por ejemplo, encontrar a mujeres embarazadas o personas adultas mayores que esperan por un asiento, en tanto que los ocupantes “duermen” y no observan la urgencia de estas personas por ir sentadas.

Otra de las situaciones que ha sido incluso motivo de denuncia es la de los acosadores, aquellos personajes que aprovechan lo apretujado que se viaja a veces en el transporte público para acosar a mujeres desprevenidas.

Asientos sucios, vendedores ambulantes, cobradores groseros, cantantes desafinados, exreclusos que venden caramelos o pasajeros sin modales, existe una larga lista de personajes y situaciones que solo se puede encontrar en el transporte público del Perú y que detestamos.