Es muy duro eso de ser el rey de la casa y que de repente un día lleguen tus padres a decirte que se te acaba esta ventaja. La pequeña Piper no se mostró nada contenta al saber que otra integrante de la familia estaba camino a casa y tampoco tuvo miedo de demostrarlo.

A la adorable Piper, con apenas dos añitos, le comunicaron que pronto tendría una hermanita, pero no se lo tomó nada bien. Su furia es tal que, por más que le preguntan si va a quererla o si le gustaría darle un abrazo, su respuesta siempre es un ¡no!

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Ella fue filmada por su padre cuando realizaba una increíble rabieta para demostrar que ella no tenía nada que ver con su hermana.

Incluso, el padre decide cambiar de táctica y le pide que entonces lo abrace a él, pero Piper no cede. Se tira al suelo y comienza a hacer una verdadera pataleta.