En medio de la tragedia llamó la atención pública el caso de un perro que el miércoles fue salvado por un grupo de policías cuando era arrastrado por las caudalosas aguas del río.

El animal estaba prácticamente muerto, pero uno de los policías, Edison Amaya, le dio respiración con su propia boca y cuando el animal reaccionó, le aplicó una inyección intravenosa de suero.

TAMBIÉN PUEDE LEER: Japón: Diez cosas increíbles que solo existen en ese país

Amaya relató el viernes que hasta el propio director de la policía, general Rodolfo Palomino, se interesó de la historia y bautizó al perro como “Príncipe”, que ha pasado a ser mascota del agente. Y lo acompaña a todos lados, contó el policía, de 23 años.

TE PUEDE INTERESAR: CSIC: Las 10 especies más sorprendentes del año