El hombre de origen árabe lloraba desesperado porque las autoridades, después de la revisión que realizaron, afirmaban que los electrodomésticos de su local ubicado en la localidad de Anzoátegui, tenían 260% de aumento de precio, según difundió el diario venezolano El Tiempo.

En su poco fluido español, Hakim Riffai se defendió, dijo que era la primera vez que le pasaba algo así: “¿Por qué ahora? Nunca había pasado antes. Yo compré a 60 mil bolívares (se refería a la última mercancía que le llegó). No puedo vender a seis”.

“Yo prefiero que la gente entre y nos saquee, nos sale más barato. Por Dios, esto es un irrespeto, es nuestro dinero ¡No me dejen sin nada!”, repetía Riffai, entre lágrimas y gritos.

En medio de la conmoción, el comerciante fue sacado del establecimiento por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana y llevado a la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), donde permanecerá detenido preventivamente. Quedó a la orden del Ministerio Público.

Después de realizar la inspección, las autoridades acordaron darle 70% de descuento a todos los electrodomésticos, pese al rechazo de los dueños y trabajadores del comercio, quienes decían que la mercancía recién adquirida no podía venderse a un precio tan bajo.

El gobierno de Nicolás Maduro lanzó “una guerra económica”, tal como el mismo mandatario la define, contra los empresarios especuladores que acaparan mercancías y venden con sobreprecios. Hace ya 5 días que comenzó a intervenir negocios como el de Hakim Riffai.