La Santa Sede investigó en los últimos 10 años unos 3,420 casos de sacerdotes que supuestamente habían abusado sexualmente de menores y, de ellos, 884 fueron destituidos y apartados, confirmó el representante permanente del Vaticano ante la ONU en Ginebra, Silvano Tomasi.

Tomasi, que compareció este martes por segundo día ante el Comité de la ONU contra la Tortura, reiteró que la Santa Sede no tiene jurisdicción penal en casos de pederastia del clero cometidos en terceros países, pero sí tiene competencia para apartar a los sacerdotes culpables si se comprueba que han cometido el delito.

“La Santa Sede no tiene competencia para juzgar a los pederastas fuera del Estado del Vaticano, pero sí que realiza procedimientos eclesiásticos contra aquellas personas sobre las que pesan abusos a menores”, explicó Tomasi.

Además, especificó que las acciones no afectarán las acciones judiciales que se practiquen en los lugares de residencia del acusado.

De acuerdo a lo explicado por Tomasi, cuando hay indicios de abuso a menores por parte de un clérigo, el obispo local “tiene el deber” de proteger a los niños, por lo que debe realizar un informe y trasladarlo a la Congregación para la Doctrina de la Fe para que esta dirima al respecto.

Fuente: EFE