. En , una vaca doméstica escapó de su granja en el otoño pasado y ha estado vagando con una manada de bisontes salvajes desde entonces, pero su aventura de invierno podría terminar pronto.

Descubierta en un bosque del mencionado país por el ornitólogo Adam Zbyryt en noviembre del año 2017, la vaca fue vista deambulando con unos 50 bisontes en la frontera bielorrusa.

En declaraciones a TVN24 el año pasado, Zbyryt dijo: “No es inusual ver bisontes cerca del Bosque de Bialowieza, pero un animal me llamó la atención. Tenía un matiz de color marrón claro, completamente diferente del resto de la manada. Los bisontes son de color castaño o marrón oscuro”.

El señor Zbyryt asumió que la vaca eventualmente regresaría a su hogar, ya que en ese momento era solo una ternera. Sin embargo, el biólogo y experto en bisontes, Rafal Kowalcyzk, según los informes, vio a la vaca de nuevo esta semana y dijo que parecía estar en buenas condiciones con los bisontes.

Kowalcyzk dijo a la AP que “la piel gruesa común a su raza y el invierno suave en el este de Polonia, en lo que va del año, también la han ayudado”.

Pero Kowalczyk, quien también es director del Instituto de Investigación de Mamíferos de la Academia de Ciencias de Polonia, advirtió que una vaca que vive entre bisontes podría representar un peligro para ambas especies.

Si la vaca queda preñada después de aparearse con un bisonte macho, ella podría morir, porque el ternero híbrido sería más grande que un ternero de vaca normal.

En consecuencia, la descendencia podría alterar la genética de la población de bisontes pequeña y en peligro de extinción en Polonia, teniendo en cuenta que se trabajó mucho para recuperarlos después de que enfrentaran la extinción después de la Primera Guerra Mundial.

Kowalczyk dijo que la vaca todavía es demasiado joven para reproducirse, pero que parece que su aventura de invierno puede llegar a su fin pronto, ya que ella debe ser recapturada antes de la primavera, para evitar el riesgo de apareamiento, de acuerdo a .