Un hombre de Nevada fue liberado después de pasar 23 años entre las rejas acusado por un crimen que no cometió. Las autoridades lograron capturar al verdadero responsable del asesinato por el cual fue condenado.

Cuando tenía 19 años, la Policía arrestó a y lo acusó por matar a tiros a un gerente de restaurante de comida rápida. El hecho ocurrió en abril de 1994 y él fue condenado a pena perpetua sin derecho a libertad condicional.

Veintitrés años después, uno de los testigos del crimen se retractó de su versión y acusó a Steven Jackson. Cuando fue arrestado, él confesó todo.

Al salir de la prisión, DeMarlo Berry señaló que todo es diferente y que lo único que quiere ahora es prepararse un plato con papas fritas y carne.

Su abogado por su parte señaló que él nunca perdió la fe. Añadió que denunciarán a los fiscales y peritos que vieron el caso.

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