, condenado por matar en junio de 2015 a nueve feligreses afroamericanos en una iglesia de (sur de EE.UU.), fue sentenciado a la pena de muerte por un jurado federal.

Dylann Roof, de 22 de años, no ha dado muestras de arrepentimiento y en su declaración final aseguró que “todavía siento que tenía que hacerlo”.

El mes pasado, los mismos miembros del jurado declararon culpable a Dylann Roof de los 33 cargos de los que se le acusaba, incluidos delitos de odio y posesión ilegal de armas.

Durante el proceso, Dylann Roof ha confesado los crímenes y ha reconocido que eligió atacar la iglesia metodista de Charleston por ser una de las más antiguas congregaciones del sur de Estados Unidos y una de las más firmes en la defensa de los derechos de los negros.

La noche del ataque a la histórica iglesia, Dylann Roof se sentó durante 45 minutos en uno de los bancos con un arma semiautomática mientras los feligreses leían la Biblia.

Dylann Roof dijo que quería iniciar una para provocar el despertar de la raza blanca y también vengarse de los afroamericanos, razón por la que en el momento de la matanza gritó ante los feligreses: “¡Han violado a nuestras mujeres, están apoderándoos de nuestro país y tienen que irse!”.

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Fuente: EFE