aumentó hoy la presión sobre Venezuela al pedir por primera vez que el Gobierno de Nicolás Maduro permita la celebración de un referendo revocatorio “a tiempo” ante la Asamblea General anual de los 34 países de la Organización de Estados Americanos (OEA).

Estados Unidos se une al secretario general (de la OEA, Luis) Almagro y a otros en la comunidad internacional haciendo un llamado al Gobierno de Venezuela para que libere a los presos políticos, respete la libertad de expresión y de reunión”, afirmó el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, en su intervención en la primera sesión de la Asamblea.

“Para que alivie la escasez de alimentos y medicinas y honre los propios mecanismos de la Constitución incluyendo un referendo revocatorio puntual que forma parte del proceso constitucional”, añadió.

El jefe de la diplomacia estadounidense se refirió así al referendo revocatorio que promueve la mayoría opositora en la Asamblea Nacional de Venezuela para que se convoque este año, mientras que el chavismo plantea que, de celebrarse, sea en 2017.

La fecha del referendo es clave, porque si se celebra este año y gana el sí a la revocatoria, se podrían convocar a elecciones presidenciales, mientras que si tiene lugar en 2017 se podría destituir a Maduro pero le sustituiría su vicepresidente.

Las peticiones que hizo Kerry a Caracas coinciden con las que Almagro exige para cualquier iniciativa de diálogo en Venezuela: referendo revocatorio este año, liberación de los “presos políticos”, respeto a los derechos humanos y apertura de canales de ayuda internacional para paliar la “crisis humanitaria”, según dijo recientemente en una entrevista con Efe.

“La invocación del artículo 20 de la Carta Democrática (para Venezuela) por parte de Almagro dará lugar a un muy necesario debate sobre Venezuela en la OEA, estamos listos y dispuestos a participar en ese debate y, junto a los socios de la OEA, a facilitar el diálogo” en Venezuela, dijo Kerry.