A primera vista da la impresión de ser un ojo, una forma celeste primordial. Este fenómeno de óptica atmosférica es relativamente común cuando cristales de hielo curvan la luz alrededor del sol, en este caso en un halo de 22 grados. Lo que no es tan común la definición y la semejanza con el ojo, una delineación simétrica perfecta.

Cuando el agua se congela en la alta atmósfera a veces se generan pequeños cristales. Si un observador pasa a través del mismo plano en el que estos cristales, el cristal de hielo puede actuar como un pequeño lente reflejando la luz del Sol hacia nuestro punto de vista.

Un fenómeno similar, pero más pronunciado es el que se conoce como “sundogs”. También en Suecia, hace un par de años se captó esta espectacular imagen de los perros de sol o soles miniaturas formando un hexágono.

Fuente: Pijama Surf