El titular de Reconciliación insistió en que los lugares donde se encuentran las armas químicas “todavía están protegidos por el Gobierno sirio, por lo que el acceso será bastante fácil”.

También descartó la hipótesis de que las armas de destrucción masiva cayeron en poder del ejército rebelde durante la guerra civil.

Por otro lado, indicó que “Siria necesitaba de un alivio de la presión internacional. No queríamos un conflicto impredecible con los Estados Unidos”.