Según el asesor del presidente ruso para asuntos internacionales, Yuri Ushakov, en conferencia de prensa, precisó que no fue un breve intercambio de pie sino que ambos líderes conversaron “sentados en butacas, durante unos 20 minutos”.

Las partes, según él, quedaron en “continuar los contactos, ante todo por canales diplomáticos, y en particular sobre una serie de cuestiones relacionadas con Siria”.

Estados Unidos y sus aliados planean lanzar contra Siria una operación militar en respuesta al ataque químico del 21 de agosto cerca de Bagdad que, según la inteligencia estadounidense, causó más de mil 400 muertos y del que Washington acusa al régimen de Bashar al Asad.

Rusia insiste en que las conclusiones de expertos sobre el uso de armas químicas en Siria sean presentadas al Consejo de Seguridad de la ONU, el único organismo capaz de autorizar el uso de la fuerza en las relaciones internacionales.

Putin mencionó, en una rueda de prensa celebrada al término de la cumbre del G20, que a la intervención militar en Siria “se oponen categóricamente Rusia, China, India, Indonesia que es el país musulmán más poblado del mundo, Argentina, Brasil, Sudáfrica e Italia”.

En favor del ataque a Siria están Estados Unidos, Turquía, Canadá, Arabia Saudí y Francia.

Fuente: Agencia Andina