Las investigaciones policiales a , de 38 años, quien asesinó y decapitó a una niña de 4 años en , determinaron el móvil del horrendo crimen que ha conmocionado a todo ese país.

Según Infobae, durante un viaje que Gulchejrá Bobokúlova realizó a Uzbekistán para visitar a sus hijos se enteró que su esposo había contraído matrimonio con una segunda mujer, lo que la deprimió en forma brutal.

A su regreso a Moscú cambió su carácter. Visitaba páginas que el matrimonio Meshcheryakova no entendía. Incluso comenzó a rezar mucho, aunque sin llegar al extremo de vestir velo, como las musulmanas.

El día del crimen, Gulchejrá Bobokúlova dijo a la policía que “escuchó voces”, tras lo cual prendió fuego la casa donde trabajaba, estranguló a la pequeña Anastasia y luego la decapitó con un cuchillo de cocina.

Posteriormente, dejó el cuerpo de la niña con la ropa de noche en su cuna y salió a la calle con la cabeza dentro de una bolsa roja. Allí se acercó a una estación de metro en Moscú al grito de “¡Alá es grande!”.

Incomprensible crimen

Los padres de Anastya, Vladimir y Ekaterina, aseguraron que Gulchejrá Bobokúlova hace un mes viajó a su tierra natal para renovar su pasaporte y, “cuando llegó a su casa, se enteró de que su marido tenía una nueva familia”.

“Ella no aceptó convertirse en segunda esposa de su marido”, aquel que tenía que mantener con su trabajo en Rusia”, contó una fuente citada por el “Daily Mail”.

Cabe indicar que Gulchejrá Bobokúlova se enfrenta ahora a una pena máxima de 20 años de cárcel, siempre y cuando la encuentren psicológicamente apta para enfrentar un juicio.

Así informaron otros medios sobre este caso:

RT Actualidad:

Infobae: