De acuerdo a un informe periodístico del portal , diplomáticos de en Perú tramaban, junto a un grupo radical del Partido Comunista peruano, un complot para asesinar a familiares de funcionarios estadounidenses en el país.

Todo inició cuando en el 2017, el primer secretario de la embajada de Corea del Norte en Lima, Pak Myong Chol, fue denunciado por acosar sexualmente a un niño menor de 15 años.

La familia de la víctima entregó las pruebas de los mensajes que Chol, quien era la máxima autoridad de la sede diplomática norcoreana en Lima, enviaba al menor. Entonces, la Policía Nacional del Perú intervino su teléfono y comenzó a escuchar sus llamadas y leer los mensajes que mandaba.

Las escuchas al teléfono de Myong Chol no sólo ratificaron el acoso al menor, sino que incluso descubrieron los contactos que ese diplomático y el tercer secretario de la embajada, Ji Hyok, mantenían con dirigentes de Patria Roja (PR), una de las ramas principales del Partido Comunista peruano, para coordinar tareas conjuntas.

En esas conversaciones, los diplomáticos norcoreanos y los líderes del PR tramaban planes para “atacar a los familiares, como esposas e hijos, de funcionarios de la embajada estadounidense en Lima”. Inclusive, llegaron a especular con la posibilidad de “asesinarlos” en el caso de agravarse la crisis entre Corea del Norte y Estados Unidos, y estallara un conflicto entre ambos países, revelaron fuentes diplomáticas peruanas a Infobae.

Ante tales evidencias, el presidente Pedro Pablo Kuczynski decidió, el 22 de diciembre, declarar persona non grata a Myong Chol y a Hyok, y les dio 15 días para dejar el país. Ambos funcionarios norcoreanos dejaron el país hace poco.