El Papa Francisco dispuso que un sacerdote argentino, condenado por pedofilia, sea privado del ejercicio de su ministerio clerical, informó la Agencia EFE.

La decisión recae sobre José Mercau, condenado a 14 años de prisión por abusar de cuatro menores cuando era párroco de San Juan Bautista en la localidad bonaerense de Ricardo Rojas, que depende de la diócesis de San Isidro (periferia norte de Buenos Aires).

“Por este decreto ha perdido automáticamente los derechos propios del estado clerical, quedando privado de todo el ejercicio del Ministerio sacerdotal”, añade el breve comunicado, firmado por el portavoz de la diócesis, Máximo Jurcinovic.

Mercau, quien estaba a cargo de un hogar que albergaba a niños de la calle, fue denunciado por pedofilia en 2005 y se reconoció culpable en un juicio abreviado.