La filmación, que fue grabada por la propia McVey, fue subida a redes sociales y causó un gran malestar en la sociedad estadounidense. La situación empeoró cuando los familiares se enteraron de que la maestra tendrá solo una suspensión temporal – y no despido – como creen justo.
“¿Cómo te metiste en esta situación?”, “¿quieres que te paralicen con una pistola?”, fueron las crueles palabras con las que McVey se dirigió al niño, en vez de tratar de ayudarlo a sacar su cabeza de allí.
Días después del hecho, la profesora se disculpó con los padres del niño a través de una carta donde aseguraba haber “cometido un grave error”, según informa The Washington Post.
Por su parte, el abogado de la familia del niño indicó que el menor sufrió una rotura de los vasos sanguíneos de los ojos mientras trataba de escapar de la silla.
Fuente: Agencias