El meteorito que este viernes dejó más de un millar de heridos en la provincia rusa de Cheliábinsk, en los Urales, liberó una energía de 500 kilotones, una treintena de veces superior a la bomba atómica de Hiroshima, según informó la agencia espacial de Estados Unidos (NASA).

“Un evento de esta magnitud ocurre una vez en 100 años”, señaló Paul Chodas, colaborador del programa de objetos cercanos a la Tierra en el laboratorio de propulsión a chorro de la NASA.

“Cuando una bola de fuego es de ese tamaño, numerosos meteoritos pueden alcanzar la superficie y es probable que en este caso lo hayan hecho varios de gran tamaño”, dijo.

Los datos infrasónicos recogidos indican que la caída del bólido, desde su entrada en la atmósfera hasta la desintegración, duró 32,5 segundos, y su señal fue recogida por once de las 45 estaciones de seguimiento situadas en 35 países.

Su trayectoria, no obstante, fue muy diferente a la del asteroide 2012 DA14 que algunas horas después pasó cerca de la Tierra, por lo que los científicos descartan la relación entre ambos.

Fuente: 20minutos.es