Según el diario ‘El Heraldo’, durante ese tiempo la pareja, en compañía de varios amigos de ambos, comieron y tomaron, esperando que a las 18:00 horas María José arribara de Tegucigalpa para unirse a la fiesta privada que tenían en el centro de recreación.

La bella joven al llegar al balneario se unió a la fiesta, compartió con los amigos, comió y tomó algunas copas, según las indagaciones realizadas por los cuerpos de inteligencia. La celebración se prolongó, y fue a eso de las 21:00 horas que el ambiente se tornó tenso por una discusión entre Sofía y Plutarco.

Según los relatos, pese a que los amigos intentaban calmar a Plutarco y bromear por el mal momento, el enojo se reflejaba en su cara, enrojecida por la cólera. Nadie da razones sobre cuál fue el motivo del disgusto entre ambos.

Se ha conocido que el motivo fue la intención de Sofía de dejar la fiesta, pero no en compañía de Plutarco, sino junto a otros de sus amigos. A las 23:00 horas la discusión se salió de control y ante los gritos de ambos, Sofía intentó marcharse del lugar.

Esto enfureció aún más a Plutarco, quien sacó su arma, una pistola 9 milímetros, y le disparó en plena pista de baile y ante la presencia de varios de los invitados a la fiesta. Con los disparos, varios de los presentes salieron corriendo del local, menos María José.

Al ver a su hermana herida, la joven se lanzó sobre ella y le reclamó airadamente a Ruiz. Plutarco no dudó en matarla disparándole por la espalda, aprovechando que María José abrazaba a su hermana herida sollozando, según los testigos del hecho.