Un nuevo ajuste de cuentas entre grupos de narcotraficantes parece ser la causa del asesinato de 13 personas cuyos cadáveres fueron hallados, apilados y con un tiro de gracia, por la Policía en el estado mexicano de Michoacán.

Se trata del hecho más grave registrado en México en lo que va de año, después de que en 2011 unas 12.000 personas murieran víctimas de la violencia originada por grupos del crimen organizado.

Los cadáveres fueron localizados a primera hora de este lunes cerca de la tienda de una gasolinera situada en la carretera que une la localidad de Zitácuaro con el municipio de Huetamo, dijeron a Efe fuentes de la Procuraduría General de Justicia de Michoacán.

Los cuerpos, todos ellos de hombres, estaban amontonados unos sobre otros y algunos presentaban huellas de torturas, además de impactos de arma de fuego en la cabeza.

Según las mismas fuentes, todos los cuerpos tenían señales de haber recibido un tiro de gracia.

Informes de medios locales no confirmados indican que las víctimas pudieron ser asesinadas el fin de semana por su estado de descomposición, aparentemente de un periodo de más de 48 horas.

En la escena del crimen había dos mensajes con amenazas dirigidas a un presunto narcotraficante identificado solamente con el apodo de “El Güero”, quien supuestamente domina el tráfico de drogas en municipios del oriente de Michoacán.