La policía de Marruecos realizó nueve operaciones en diferentes puntos del país donde funcionada una célula terrorista que había jurado lealtad al Estado Islámico y que tenía planeado perpetrar asesinatos contra personalidades de la política y militares.

Entre las acciones que iban a realizar los miembros de esta célula, de la cual aún no se precisa el número de sus miembros, se contabilizaba un ataque a policías, a quienes además les robarían sus armas.

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Los detenidos habían prestado juramento de lealtad a Abu Bakar al Baghdadi, autoproclamado “emir” del Estado Islámico, y habían participado en el envío de jóvenes marroquíes a Irak y Siria “mediante financiación extranjera”, informaron las autoridades.

Según cifras oficiales, de 1.500 a 2.000 marroquíes combaten o combatieron recientemente en el seno de organizaciones yihadistas, en Irak y en Siria pero también en Libia.

Fuente: Infobae.