El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva afirmó que el resultado del Mundial 2014 no influirá en las elecciones del 5 de octubre próximo, en las cuales la mandataria Dilma Rousseff, su delfín político, se juega la reelección.

Además, Lula afirmó que el país sufrió “terrorismo” informativo sobre las supuestas fallas en la preparación del Mundial y que la ola de protestas que se auguraban para el torneo deportivo “fue diezmada por el pueblo brasileño”.

En una entrevista ofrecida a un grupo de corresponsales extranjeros en Sao Paulo, el exmandatario descartó que el resultado del Mundial pueda influenciar el futuro político de Rousseff.

“No creo que el resultado del Mundial pueda influir en la cuestión electoral. Yo fui electo en 2002 venciendo al oficialismo de entonces luego de que la selección venciera el Mundial y reelecto en 2006, tras la eliminación en Alemania”, dijo el ex mandatario (2003-2010).

EFE