Las autoridades de la ciudad suiza de Lausanne han aprobado ya el proyecto piloto para pagar a sus residentes. ¿La razón? Agradecerles por vivir ahí, agilizar la economía, terminar con las desigualdades sociales e incentivar el trabajo.

Sin embargo nada está dicho porque el próximo 5 de junio, los ciudadanos suizos votarán en referéndum para aprobar o no la medida, que plantea dar una asignación mensual de 2.600 dólares (2.300 euros) a los adultos y 650 dólares (575 euros) a los menores de edad que habiten la ciudad de Lausanne.

El plan surge a partir del modelo de la ciudad de Utrech, y se estima que alcance una población de 120.000 personas, que requerirán de la financiación del Gobierno tanto nacional como regional.

La iniciativa ha sido recibida con críticas y alabanzas por parte de los políticos de Lausanne. Los que se muestran a favor argumentan la decisión en la necesidad de buscar un equilibrio económico, mientras que los escépticos opinan que puede derivar en falta de motivación laboral.

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