El régimen de fusiló a un viceprimer ministro que se quedó dormido, aseguró el Gobierno surcoreano, precisando que se trata de una “campaña de terror y purgas de altos oficiales emprendida por el líder “.

Kim Yong-jin, de 63 años y responsable del área de educación, fue interrogado por los servicios de seguridad del Estado comunista y posteriormente ejecutado por un pelotón de fusilamiento el pasado mes de julio, anunció el Ministerio de Unificación de Seúl.

El veterano político “mostró una actitud negativa durante una importante reunión parlamentaria a finales de junio”, lo cual habría sido motivo suficiente para considerarlo un “elemento antirrevolucionario y antipartido” y ordenar su ejecución, , indicó a Efe una representante del departamento de Unificación surcoreano.

La información sobre el fusilamiento de Kim, uno de los cuatro vice primeros ministros del Gobierno de Pyongyang, llegó al ejecutivo surcoreano “a través de varios canales”, según la representante de Unificación.

Aunque el extremo hermetismo de Corea del Norte hace imposible confirmar la noticia —en algunas ocasiones este tipo de informaciones se han probado después erróneas— una mayoría de expertos en Seúl ha confiado en su veracidad y sacado algunas conclusiones.

Las supuestas nuevas purgas de Kim Jong-un llegan en un momento en el que se cuestiona la estabilidad del régimen tras publicarse noticias de deserciones de enviados norcoreanos en el extranjero, entre ellas la de Thae Yong-ho, que era el número dos de la Embajada de Corea del Norte en Londres.

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