La idea, dijo José Mujica, es “identificar a los que consumen, sacarlos de la sombra y que tengan una oportunidad regulada para que no tengan que recurrir al narcotráfico (…) queremos arrebatarle el mercado al narcotráfico por la vía de competirle”.

Mujica explicó a CNN una vez más cuál es el objetivo de su polémica propuesta. “Lo que intentamos hacer en Uruguay no es un viva la pepa”, afirmó al explicar que la regulación de esta droga no significará que se pueda comprar en una farmacia para luego “darse la biaba en el malecón de la rambla”.

Por otro lado, tras la reunión con David Rockefeller, el mandatario dijo que el empresario estadounidense quería “saber cómo instrumentábamos la política con respecto a la droga” ya que “la política antidrogas y antinarcotráfico que se ha aplicado acá (por Estados Unidos) no da resultado”, informó El Espectador.

“Creo que tiene una visión positiva: le relaté lo que fue la historia del alcohol en Uruguay, el estanco por parte del Estado, que esto era un experimento que queremos hacer por las dimensiones que tiene Uruguay, de tratar de encontrar camino”, afirmó.