Kendall y Baylee no son gemelas ordinarias. Se trata de uno entre un millón. Un sorprendente capricho de la genética ha provocado que una hermana tenga la piel negra y la otra sea de color blanco.

Según el “Daily Mail”, como se trata de gemelas no idénticas, ambas fueron concebidas cuando dos óvulos fueron fertilizados por dos espermatozoides. Esto significa que han heredado diferentes genes de sus padres.

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“Cuando nacieron, ambos nos miramos, no podíamos creerlo. Fue una sensación encantadora y un gran shock. Una cosa que sé con certeza es que la familia y amigos no tendrán que luchar mucho para distinguirlas”, expresó la madre, Rebecca Horton.

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Pero, en las probabilidades de un millón a uno, Baylee ha heredado un conjunto de genes de la piel blanca. Y la herencia genética de Kendall, que incluyen algunos genes que codifican la piel negra, pasaron de su padre. Ambas también tienen caracteres muy diferentes.

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