“Mira cómo lo he despellejado y comí un gato”, decía el mensaje en Weibo de una joven que torturó hasta la muerte a un felino para comérselo. Todo este procedimiento fue narrado en la red social china.

Esta publicación causó la indignación entre todos los usuarios de esa red social, quienes inmediatamente le hicieron sentir su repudio con mensajes de odio.

Sin embargo, Jin Bang, quien vive en la provincia de Guandong, se defendió de todos sus detractores indicando que había encontrado al felino malherido en una calle. Al parecer había sido atropellado, por lo que ella solo “le hizo un favor”.

Además señaló que nada de lo que hizo es ilegal, pues en su ciudad no está prohibido el consumo de animales como los gatos, es más Guandong es conocida por sus comidas exóticas que incluyen felinos, insectos y hasta serpientes.