Un presunto yihadista asesinó de nueve puñaladas y en la puerta de su domicilio a Jean-Baptiste Salvint, un policía de 42 años, y se atrincheró después en la casa de la víctima con su mujer y su hijo en Magnanville, localidad de unos 6.000 habitantes del departamento de Yvelines.

Hacia las 00:00 hora local los cuerpos de policía del RAID y el BRI dieron el asalto y al término de la intervención las autoridades informaron de la muerte también de la pareja del policía, igualmente funcionaria del Ministerio del Interior.

El hijo de ambos, de 3 años, fue encontrado vivo y sin ninguna lesión, según confirmó en un comunicado el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, que seguirá la investigación desde el terreno.

“El agresor ha sido neutralizado por las fuerzas de intervención de la policía, que han demostrado tener mucha sangre fría y un gran profesionalismo y que han salvado la vida del pequeño”, agregó Cazeneuve.

Previamente a las detonaciones que indicaron el inicio de la operación policial, el lugar había sido acordonado por un perímetro de seguridad, y las fuerzas de seguridad desalojaron varias de las viviendas colindantes y cortaron la electricidad y el gas en la zona.

El agente estaba destinado en la comisaría de la cercana Mureaux, con el puesto de jefe adjunto de la policía judicial. Antes había servido en la de Mantes-la-Jolie. “Era un policía muy simpático y tenía muy buena reputación”, declaró a “Le Parisien” uno de sus compañeros.

En un comunicado, el presidente de Francia, François Hollande, prometió que se averiguarán las circunstancias del “drama abominable cuya investigación, bajo la autoridad de la justicia, determinará su naturaleza”.

Francia se encuentra bajo un protocolo de estado de emergencia desde los atentados yihadistas del pasado 13 de noviembre en París que dejaron 130 muertos en varios ataques simultáneos.

Homenaje a víctimas de la masacre de Orlando en la Copa América:

Fuente: EFE