lleva a cabo operaciones “secretas” a través de sus fuerzas especiales contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI, o Daesh) en Libia, informó hoy el diario galo “Le Monde”.

A estas maniobras, “puntuales” y con “objetivos precisos”, se añaden otras con carácter “clandestino”, dirigidas por el servicio de inteligencia exterior francés (DGSE), indicó “Le Monde”, que cita varias fuentes oficiales.

La diferencia entre ambas estriba en que las primeras son realizadas por soldados de uniforme, por lo que comprometen a Francia, y las segundas, aunque también ejecutadas por militares, permanecen “invisibles”, según este mismo medio.

Los dos tipos de actuaciones son consideradas, de acuerdo con la doctrina militar, como “precursoras” de una guerra abierta, pero no implican la apertura de una futura operación de esta naturaleza, agrega “Le Monde”, que precisa que la línea del presidente francés, François Hollande, se basa en operaciones militares “no oficiales”.

En ese sentido, un alto responsable francés de Defensa señaló al periódico la necesidad de “evitar todo combate militar abierto” y “actuar discretamente”. “La última cosa que habría que hacer sería intervenir en Libia”, agregó la fuente.

Las autoridades de Libia, precisa “Le Monde”, toleran este tipo de acciones pero rechazan una coalición internacional en suelo libio.

La implantación del ISIS en Libia supone que “por primera vez ese grupo terrorista tiene acceso a la costa”, lo que acerca a la organización al sur de Europa, subrayó una fuente del Estado Mayor de la Marina francesa. “Nos preparamos para escenarios duros en el mar”, prosiguió.

Las acciones que describe “Le Monde” – concertadas entre Washington, Londres y París – buscan golpear la cúpula directiva del ISIS y frenar su ascenso, agregó.

La muerte el pasado noviembre en Derna del considerado como el principal responsable del ISIS en Libia, Abu Nabil, se inscribe en este marco y habría sido facilitada por “una información francesa”, según apunta al diario una fuente cercana.

Esas operaciones secretas también habrían dado como resultado el ataque el pasado 19 de febrero contra un alto responsable del ISIS en Túnez, Nuredine Chuchane, cuya muerte no ha sido confirmada por el Gobierno de ese país.

Antes que él, las operaciones militares apuntaron a Mojtar Belmojtar, jefe del grupo afiliado a la rama argelina de Al Qaeda y denominado Al Murabitún.

Fuente: EFE