Un ciudadano canadiense, acusado de tenencia ilegal de armas, abrió fuego en un tribunal de Filipinas y mató a dos personas antes de ser abatido por la Policía, informaron medios del país asiático.

El tiroteo ocurrió en el Tribunal de Justicia de la ciudad de Cebú, cuando John Pope sacó una pistola para luego disparar a matar a su abogado Julian Assis, y al denunciante, el médico Rene Rafols.

Asimismo, hirió a un fiscal y más tarde John Pope se suicidó en una sala de audiencias judiciales.

Este hecho en medio de un debate en el país sobre el control de armas después de una serie de tiroteos recientes, incluyendo uno a principios de este mes que dejó siete muertos.