Titulada ‘Las verdades objetivas y los sueños’ y publicada en el diario del régimen ‘Granma’, el histórico líder relata como aquel 26 de julio de 2006, después de una visita de Hugo Chávez, enfermó “gravemente” y cómo fueron los días posteriores.

Revela por primera vez que su enfermedad era definitiva. “Apenas comprendí que sería definitivo no vacilé un segundo en proclamar el día 31 que cesaba en mis cargos como Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, y propuse que el compañero designado para ejercer esa tarea procediera de inmediato a ocuparlo”, escribe en una carta en la que además de contar cómo se desarrolló la famosa crisis de los misiles confiesa que el recientemente fallecido Chávez fue “su mejor amigo”.

“Hoy guardo un especial recuerdo del mejor amigo que tuve en mis años de político activo, quien muy humilde y pobre se fraguó en el Ejército Bolivariano de Venezuela, Hugo Chávez Frías”, relata.

“De Hugo Chávez faltaron muchas preguntas por responder, desde el momento más importante de su existencia, cuando tomó posesión de su cargo como Presidente de la República de Venezuela. No existe una sola pregunta que responder en los más brillantes momentos de su vida. Los que lo conocieron bien saben la prioridad que daba a esos desafíos ideológicos”.

Y añade: “Hombre de acción e ideas, lo sorprendió un tipo de enfermedad sumamente agresiva que le hizo sufrir bastante, pero enfrentó con gran dignidad y con profundo dolor para familiares y amigos cercanos que tanto amó. Bolívar fue su maestro y el guía que orientó sus pasos en la vida. Ambos reunieron la grandeza suficiente para ocupar un lugar de honor en la historia humana”.

En las tres páginas del texto Castro repasa asuntos como la colaboración militar de Cuba con la Unión Soviética, la Crisis de los Misiles, la muerte del presidente de EEUU John F. Kennedy y hasta menciona los planes de “involucrar” a Cuba en su asesinato.

Fuente: ABC