Aviones de combate de Estados Unidos empezaron ataques aéreos en Raqqa, bastión de ISIS en Siria, en la mañana del martes (hora local).

Se trata de los primeros ataques contra el grupo terrorista dentro de ese país desde que el presidente Barack Obama anunciara este mes que estaba preparado para ampliar los esfuerzos estadounidenses contra objetivos por fuera de Iraq, dijo un funcionario del Gobierno de EE.UU. a CNN.

Además, el contralmirante John Kirby, portavoz del Pentágono, dijo que “fuerzas de naciones aliadas” también participan en los ataques.

El Senado de Estados Unidos dio la aprobación final el pasado jueves a la petición del presidente Obama para armar y entrenar a los rebeldes sirios en su lucha contra ISIS.

La noticia llegó luego de que el grupo terrorista autodenominado Estado Islámico avanzó en su control sobre partes de Siria e Iraq.

“Nuestra misión es asesorar y asistir a nuestros socios en el terreno y lo haremos fuera de Siria”, dijo Obama. Hay que recordar “que no habrá tropas estadounidenses en el Medio Oriente”.

Y aseguró desde la Casa Blanca que continuarán los ataques aéreos en Iraq “contra los terroristas”, con el objetivo de seguir destruyendo sus equipos.

Los aliados occidentales se comprometieron a pelear intensamente contra ISIS este lunes luego de que el grupo terrorista convocara a atacarlos.