Las decenas de visitantes de una playa en Florida se quedaron atónitos al ver a un tiburón martillo pariendo varios ejemplares en plena orilla.

El animal fue arrastrado hasta la playa por un pescador y ahí, en medio de las miradas y algunos gritos por parte de los veraneantes, empezó a parir.

Luego del alumbramiento, los turistas intentaron regresarlo al mar, pero murió al poco tiempo.

Según los expertos, la camada de tiburones recién nacidos se caracteriza siempre por ser muy independiente. “Estos animales nadan y se alejan de la madre tan pronto salen del cuerpo”, dijo un pescador.


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Fuente: Globovision.com

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