Más de un centenar de activistas a favor de una reforma migratoria justa se dejaron arrestar este jueves frente a la Casa Blanca en un acto de desobediencia civil para reclamar al presidente de EE.UU., Barack Obama, un alivio para los 11 millones de indocumentados que corren el riesgo de ser deportados.

Las detenciones, cerca de 140 según los organizadores, fueron la culminación de una marcha que comenzó ante la Oficina de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) para pedir a Obama que legalice “a la mayor cantidad de inmigrantes como le sea posible”.

El director ejecutivo de la organización Casa Maryland, Gustavo Torres, dijo a Efe que el presidente estadounidense “puede y debe” detener las deportaciones, que separan a familias enteras.

“Pedimos a Obama un alivio justo y necesario para las comunidades de inmigrantes en el país”, subrayó Torres ante unas quinientas personas entre jóvenes, madres, niños y familias enteras.

Convocados por varias asociaciones a nivel nacional, los activistas prorreforma se dirigieron desde la sede del ICE a la Casa Blanca, donde protagonizaron un acto de desobediencia civil.

Los manifestantes se sentaron frente a la verja que circunda la residencia presidencial y fueron arrestados entre los aplausos de los centenares de personas que participaron en la marcha.

“Estoy dispuesta a dejarme arrestar porque ya llevo más de una década de estar por la reforma, de visitar oficinas de congresistas, de estar ayunando en carpas, de estar registrando votantes”, dijo a Efe Susana Sandoval, de la organización “We Belong Together”.

Identificados con un brazalete negro atado en el brazo derecho, los activistas arriesgaron su libertad para exigir al presidente que “actúe cuanto antes” y tome una acción que sea permanente, como la suspensión de las deportaciones.

Con lemas como “Si se puede” y “Obama, escucha, estamos en la lucha”, las asociaciones de activistas unieron sus voces a favor de legalizar a los más de 11 millones de indocumentados que se calcula que hay en el país, dada su gran contribución económica, enfatizó el portavoz del sindicato Trabajadores de Estadios Unidos, Larry Cohen.

Así mismo, los activistas recordaron el poder de los inmigrantes en las urnas.

Fuente: EFE