Melissa Boart (36) era maniaco-depresiva. Ella escapó en su vehículo, pero su familia logró ubicarla gracias al navegador GPS y pidió ayuda a la Policía, ya que sospechaban que ella tenía intenciones de suicidarse. Sin embargo, en lugar de ayudarla, los agentes le dispararon hasta matarla, de acuerdo al abogado de la familia de la víctima. Dos policías han sido suspendidos a causa del incidente.

Fuente: