Clarence Moore escapó de la cárcel en 1976 y aunque supo eludir a las autoridades de Estados Unidos durante casi 40 años, ahora ha decidido entregarse a la justicia. ¿Por qué se rindió?
Fue condenado en 1967 por robo en Carolina del Norte y ahora, a los 66 años decidió retornar a prisión debido a sus problemas de salud. Moore debido a su condición de prófugo no cuenta con documento de identidad o de seguro social, por lo que atenderse le era casi imposible.
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Él mismo se comunicó con la policía para someterse a la Justicia y cuando fue arrestado el prófugo comenzó a llorar. “Tan pronto como nos vio, empezó a llorar”, dijo Pat Melton, sheriff del condado de Franklin.
Moore vivía en Kentucky desde al menos 2009. Utilizaba varios alias y sus vecinos lo conocían como Ronnie T. Dickinson. Uno de ellos dijo que Moore era una persona reservada que se había mudado al vecindario hacía unos tres o cuatro años. Vivía con una mujer que desconocía su pasado delincuencial.
Fuente: Infobae.