Un pedófilo identificado como Antonio Cárdenas, de 32 años, quien se encontraba en México, recibió una invitación para acudir a una fiesta sorpresa de cumpleaños para un menor y fue capturado en Estados Unidos.

La víctima, ahora de 12 años, había sido ultrajada en varias oportunidades cuando tenía apenas 7 años. Fue en 2004 cuando entró en contacto con su agresor, a quien consideraba su mentor e incluso viajaron juntos a Las Vegas.

Cárdenas fue condenado a 30 años de prisión por abuso sexual y le impusieron 5 años más por el delito de pedofilia, puesto que había armado una amplia red de distribución de pornografía infantil por Internet, informó RPP.