Una pastilla anticonceptiva basada en una planta conocida como gandarusa está siendo desarrollada en Indonesia; científicos indoneses estarían por lograr lo que las farmacéuticas occidentales han intentado por años.

En la isla de Papua, Indonesia, los hombres locales desde hace mucho tiempo han notado que la gandarusa tiene un efecto particular: Si se mastica suficiente sus hojas las mujeres no se embarazan. Ahora, los científicos indoneses han transferido el conocimiento popular al laboratorio y dicen haber extraído efectivamente el ingrediente activo para producir de forma masiva una pastilla.

Si lo que dicen es cierto, habrían logrado lo que las grandes farmacéuticas occidentales han intentado sin éxito por décadas: Una pastilla anticonceptiva para hombres.

“Con suerte, podríamos darla a conocer este año, aunque probablemente será vendida hasta el siguiente”, dijo Sugiri Syarief, director de la Junta Nacional de Planeación Familiar de Indonesia.

Los investigadores empezaron a analizar la gandarusa en 1988 y patentaron el compuesto en el 2007. Según el gobierno la sustancia previene el embarazo al detener la actividad de ciertos enzimas en el esperma que ayudan a inseminar el óvulo.

Pruebas clínicas han mostrado que el esperma se mantiene saludable. Lo que pasa es que simplemente no puede penetrar el óvulo de una mujer por cerca de 72 días, sin efectos secundarios, e incluso, según algunos voluntarios, incrementa el deseo sexual.