Eva Braun tenía 17 años y trabajaba como asistente para Heinrich Hoffmann, el fotógrafo personal de Adolf Hitler, cuando conoció al líder nazi en Múnich.

Dos años después de ese encuentro en 1929, Braun y el dictador alemán comenzarían a verse habitualmente transformándose la joven fotógrafa en amante del nazi, quien comenzaría a agasajarla con regalos de todo tipo.

El tema acerca del origen y destino de los regalos de Hitler a Braun volvió a removerse nuevamente este jueves, ya que la Pinacoteca de Múnich ha confirmado que un sobrino ya fallecido de la amante del Führer presentó un recurso ante el Tribunal de Múnich para que se le restituyan a la familia los regalos que Hitler hiciera a Braun.

Pero los herederos del sobrino, según confirmó el museo bávaro, han rechazado continuar con la demanda.

Braun y Hitler contrajeron matrimonio el 29 de abril de 1945, menos de dos días después ambos se suicidan; Braun con la ingestión de una cápsula de cianuro.

A la hora del suicidio, Hitler se encontraba empadronado en Múnich, razón por la cual el ministerio de Finanzas de este Land recibe los derechos de autor de “Mein Kampf”, libro que pertenecía a la editorial del partido nazi Eher-Verlag y con la obligación de evitar su publicación. También recibe obras de arte y numerosos objetos de valor que han ido a parar a la colección de pintura del Estado de Baviera, como un reloj de brillantes grabado con el nombre de Eva Braun que Hitler regaló a su amante con motivo de su 27 cumpleaños.

El reloj en cuestión, que se encuentra almacenado en el depósito de la pinacoteca bávara, fue uno de los objetos reclamados por su sobrino, información que han confirmado dando un nuevo giro al encendido debate acerca del arte robado por los nazis.

Luego de la muerte del sobrino de Braun, sus herederos han rechazado continuar con la demanda que no sólo incluía el reloj de brillantes sino una pintura que perteneció a la fotógrafa: “Gebirgslandschaft an der spanischen Küste” (Paisaje montañoso en la costa de España), de Fritz Bamberger, una obra que se encuentra en el sitio web Lost Art, ya que no está descartado que fuera robada a familias judías.

El tesoro maldito de Eva Braun ha reabierto el debate acerca de la gestión alemana respecto del arte robado por los nazis y las pertenencias de Hitler y sus comandantes. Se acaban de cumplir ochenta años de la llegada del líder nazi al poder y el Estado germano no ha sido capaz de tomar decisiones respecto del legado nacionalsocialista que se encuentra en diferentes instituciones como la Pinacoteca de Múnich.

Fuente: ABC