Las operaciones de reflote comenzaron a las 6:00 horas local de este lunes y en esta primera fase la embarcación se desprendió de las plataformas artificiales submarinas en las que permanecía apoyada con ayuda de unos grandes contenedores metálicos.

Posteriormente, fue trasladado 30 metros mar adentro en dirección este, para ser atracada y que los técnicos puedan completar algunas operaciones, como la tensión de cables y cadenas, antes de su traslado definitivo a Génova.

De este modo y ayudada por varios remolcadores, la embarcación recorrerá 200 millas náuticas (370 kilómetros) a una velocidad de dos nudos (3,7 kilómetros por hora).

Será en esa ciudad italiana donde se procederá a su desguace, tal como anunció el primer ministro italiano, Matteo Renzi, el pasado 30 de junio.

“Estamos extremadamente satisfechos con los resultados obtenidos esta mañana”, afirmó en rueda de prensa el responsable del proyecto, Franco Porcellacchia.

EFE