Según ‘The Huffington Post’, la felicidad nacional no solo se calcula a partir de seis factores clave generalmente reconocidos, como el PIB real per cápita, la esperanza de vida, la libertad para tomar decisiones en la vida, la libertad frente a la corrupción o la generosidad.

Hay condiciones que van más allá de estos componentes y que Dinamarca reúne. Por ejemplo, las familias de ese país reciben un total de 52 semanas de excedencia por maternidad.

Las madres de Dinamarca pueden tomarse 18 semanas y los padres reciben 2 semanas con hasta el 100% de salario. El resto del tiempo libre pagado la familia puede utilizarlo como prefiera.

Apoyo social

En Dinamarca el apoyo no se limita a los subsidios. Los niños daneses tienen acceso a atención gratuita o de bajo costo, lo que permite a las madres jóvenes regresar al trabajo si quieren. En resultado, el 79% de las madres vuelven a su nivel de actividad anterior.

En ese país la atención sanitaria es un derecho civil y una fuente de apoyo social. Ciudadanos daneses reciben atención médica como un derecho fundamental y están en contacto con su médico de atención primaria un promedio de casi siete veces al año.

Igualdad de género

Dinamarca se encuentra normalmente entre los 10 primeros países por igualdad de género, según el informe anual del Foro Económico Mundial. Mientras que ningún país del mundo ha logrado la paridad de género, Dinamarca y otros países nórdicos se acercan a este nivel.

A pedales

A ello se suma el hecho de que en la ciudad más poblada y más grande, Copenhague, las bicicletas representan el 50% de los desplazamientos de sus residentes, tanto para ir a la escuela como para acudir al trabajo, lo que mejora los niveles de condición física, reduce las emisiones de carbono y contribuye a la riqueza de la ciudad.

Los ciclistas cubren en Copenhague 1,2 millones de kilómetros diarios, ahorrándole a la ciudad más de 34 millones anuales. Además, sólo 30 minutos de pedaleo diario aumentan de promedio entre uno y dos años la esperanza de vida de los ciclistas.

El placer de vivir

En Dinamarca es muy popular el llamado ’hygge’ traducido como ‘intimidad’ y que se considera la principal arma en la lucha contra la oscuridad lúgubre que envuelve al país nórdico durante el invierno. En otras palabras, el concepto remite a una escena agradable, llena de amor y de placer que puede ayudar a mitigar algunos de los peores efectos psicológicos de la temporada.

Después de todo, tanto las fuertes conexiones sociales como los alimentos asociados con el ’hygge’, tales como el chocolate, el café o el vino, son catalizadores de este estado de ánimo.

Responsabilidad y voluntariado

Otro secreto de felicidad reside en el hecho de que los daneses no dan excesiva prioridad a la seguridad social y la seguridad privada y tienen un verdadero sentido de la responsabilidad colectiva. Y este deber cívico, combinado con la seguridad económica y el equilibrio entre vida laboral y personal, cobra forma en una alta tasa de voluntariado.