El hallazgo contradice las ideas convencionales según las cuales la infección con la hidrofobia es siempre fatal a menos que se administre un tratamiento inmediato, según publica la revista American Journal of Tropical Medicine and Hygiene.

Los investigadores que estudian poblaciones remotas de la Amazonía peruana en riesgo de contraer la rabia de los murciélagos vampiro encontraron que el 11 por ciento de las personas examinadas mostró evidencia de anticuerpos contra la enfermedad.

Entre ellas, sólo una persona informó que había sido vacunada previamente, añadió el artículo sobre el trabajo realizado por el Ministerio de Salud de Perú y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC por sus siglas en inglés).

“En su gran mayoría, los casos de rabia que evolucionan a infecciones clínicas son fatales”, indicó Amy Gilbert, del Centro Nacional de Enfermedades Infecciosas Emergentes y Zoonóticas de los CDC.

“Esto significa que podrían desarrollarse tratamientos eficaces que ayuden a salvar vidas en áreas donde la rabia persiste como causa de fallecimiento”, agregó.

Los expertos en rabia estiman que la enfermedad mata a 55.000 personas cada año tan solo en África y Asia, y que parece estar en aumento en China, la ex Unión Soviética, el sur de África y América Central y del Sur.

Para su investigación, los científicos viajaron a dos comunidades (Truenococha y Santa Marta) en la Amazonía peruana, donde ha habido brotes de infecciones fatales con rabia causadas por mordeduras de murciélagos vampiro – el “reservorio natural” más común de la enfermedad en América Latina – a lo largo de las dos últimas décadas.

Las investigadores entrevistaron a 92 personas, 50 de las cuales reportaron mordeduras de murciélagos. Se tomaron muestras de sangre de 63 individuos y siete (11 por ciento) mostraron “anticuerpos neutralizadores del virus de la rabia”.

Los investigadores reconocieron que no podían determinar en forma concluyente si los anticuerpos se originaron por exposición al virus en niveles insuficientes para producir la enfermedad. Pero creen que su evidencia “sugiere que la exposición al (virus de la rabia) no es invariablemente letal para los humanos”, según el artículo.

En la región amazónica donde se llevó a cabo el estudio – la Provincia de Datem del Maranón en el Departamento de Loreto en el norte de Perú – los murciélagos vampiros, que viven de la sangre de los mamíferos, salen de noche regularmente y prefieren alimentarse del ganado.

Pero cuando están ausentes esas fuentes de alimento, se sabe que buscan alimentarse de humanos. Pueden utilizar sus dientes extremadamente afilados y el anticoagulante presente naturalmente en su saliva (conocido apropiadamente como “draculín”) para alimentarse de las personas mientras duermen, sin despertarlas.

El virus de la rabia circula intensamente en las colonias de murciélagos vampiro en la región, y cuando un murciélago infectado se alimenta, pasa el virus a su huésped.

EFE