Vestidos con uniformes de color rojo o azul, las estudiantes para aeromozas de deben hacer muchas pruebas para graduarse y obtener un buen empleo.

Los asistentes de vuelo son entrenadas en todo, desde cómo dar la mano hasta tener la postura correcta para recibir a los pasajeros y miembros de la tripulación.

Para lograr notas sobresalientes, las estudiantes se ayudan de libros en la cabeza, espejos gigantes y hasta colocan papel entre sus piernas. Tambiién ensayan por largas horas cómo sonreír, así como la forma de sentarse correctamente.

También aprenden a dar la mano y caminar e incluso de cuclillas. Si te preguntas para qué sirve todo esto, la respuesta es sencilla: para optimizar los servicios comerciales aéreos y hacer que miles de turistas que llegan a China valoren su experiencia y anhelen volver.

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