Las condiciones climatológicas, las características geográficas y los problemas estructurales fueron la combinación perfecta para la propagación del incendio que asola al puerto chileno de Valparaíso desde el sábado 12 de abril.

Fernando Maldonado, experto en manejo del fuego de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), el organismo oficial chileno a cargo de coordinar las tareas de extinción, explicó las características particulares de este incendio, que provocó 15 muertos, la destrucción de 2.000 viviendas y deja a más de 8.000 damnificados.

Se están investigando las causas del incendio, pero lleva tiempo. En general, en Chile más del 99% de los incendios son causados por negligencia o imprudencia de las personas, por actividad humana o, incluso, por una cierta intencionalidad.

En algunos casos, puede producirse por la existencia de cables eléctricos que generen chispas e inicien un fuego.

En Valparaíso tenemos el viento costero, también ese sector, que no había tenido incendios durante muchos años, contaba con una vegetación muy densa, a lo que se suman los desperdicios que la población arroja, que se convierten en combustible.

El estado de la vegetación por la sequía del país genera una combustión rápida y muy intensa. Las pendientes de las laderas facilitan la propagación ascendente del fuego hacia las partes altas, donde están las casas, y dificultan las tareas de extinción.

En los alrededores del incendio, no hay fuentes de agua cercanas y los bomberos tienen que subir por caminos de difícil acceso para llegar a todos los recovecos.

Fuente: Infobae