Son fabricados en Israel, comprados por Brasil y pronto podrán sobrevolar Bolivia según un acuerdo a punto de cerrarse: los aviones no tripulados Heron 1 son la nueva apuesta brasileña contra el narcotráfico.

Autoridades de Brasil y Bolivia se aprestan a ultimar este viernes en La Paz los detalles de un pacto que habilita el uso de Vehículos Aéreos No Tripulados (Vants) de la Policía Federal brasileña en cielos bolivianos.

Estos aparatos están equipados para capturar y transmitir imágenes de tierra volando a kilómetros de altura, pero la información sobre cómo va a funcionar el programa en Bolivia escasea hasta ahora.

El embajador boliviano en Brasilia, Jerjes Justiniano, anticipó que el acuerdo deberá tomar en cuenta diversos factores y “no solamente el tema de la violación del espacio aéreo”.

Se supo que estas naves tienen aparatos sofisticados de investigación y de observación, desde aerofotografías hasta radares sofisticados para detectar pistas y zonas.

Fuente: BBC