La deforestación de la Amazonia brasileña aumentó un 28 por ciento en 2013, el porcentaje más alto desde el inicio de la vigilancia satelital del bosque húmedo en 1988, advirtió este jueves la ministra de Medio Ambiente, Izabella Teixeira.

Se trata de una mala noticia que habíamos anticipado y se confirma que el estado de Pará registró un ascenso en la tala de árboles, con áreas de deforestación de más de mil hectáreas, resaltó.

En rueda de prensa, Teixeira dijo que lo que ocurre en la Amazonia es un crimen e informó que cuentan con más de mil agentes en ese territorio, entre fuerzas del Ejército, la Policía y fiscales ambientales.

La titular puntualizó que la justicia emprendió tres mil 921 investigaciones criminales relacionadas con la tala ilícita de arboles y se arrestaron 148 personas, incluidos 20 funcionarios públicos.

Considerado como el segundo estado más grande de los nueve que forman la Amazonia, Pará registró dos mil 379 kilómetros cuadrados de deforestación, lo cual representó un 37 por ciento más con respecto a 2011.

Según la ministra, la mayor parte de la desaparición de la masa forestal ocurrió en los alrededores de la carretera que une los estados amazónicos de Mato Grosso y Pará, y ya comenzó un proceso de revitalización de esos espacios por parte del Gobierno.