El Carnaval de Oruro, la celebración festiva más famosa de Bolivia y reconocida como patrimonio de la humanidad por la UNESCO, se tiñó de luto con la muerte de cuatro personas al desplomarse una pasarela durante el principal de sus desfiles.

Los coloridos bailes y la alegre música que caracterizan la Entrada Folclórica del Carnaval cesaron tras el accidente y, cuando el desfile se reanudó, lo hizo convertido en un cortejo fúnebre en el que muchos de los participantes se quitaron las máscaras y prendieron crespones negros en sus estandartes.

La caída de la pasarela tuvo lugar sobre las 18:00 horas de Bolivia (22.00 GMT), en el momento en que 35 mil bailarines participaban en la principal celebración del Carnaval orureño, al que acuden cada año cientos de miles de visitantes.

Tres de los fallecidos eran integrantes de la banda orureña Poopó cuyos compañeros decidieron continuar el desfile, aunque lo hicieron entre lágrimas de desconsuelo y tocando música fúnebre. La cuarta víctima mortal era una espectadora.

Romero precisó que la pasarela hundida había sido construida específicamente para el Carnaval y se desplomó por exceso de peso.

El presidente de Bolivia, Evo Morales, expresó su “consternación” por el accidente y su “solidaridad y apoyo” a las víctimas, según dijo la ministra boliviana de Comunicación, Amanda Dávila, a través de su cuenta en la red social Twitter.

Fuente: EFE